viernes, 28 de abril de 2006

Sobre Castilla

Sobre la decapitación de Castilla que cada año perpetran PSOE y PP en las campas de Villalar

Juan Pablo Mañueco
Diario Nueva Alcarria

La colonia castellana (zona Duero) rememoró el domingo, 23 de abril, la decapitación del toledano Juan de Padilla y del atencino Juan Bravo en Villalar de los Comuneros, junto al salmantino Francisco Maldonado, en 1521... Hecho del cual algunos todavía no se habían enterado, por lo que se ve: que Padilla es de donde siempre ha sido y que Juan Bravo era de Atienza (Guadalajara), aunque se avecindara posteriormente en Segovia, a cuya ciudad representó durante la Guerra de las Comunidades de Castilla.

La Junta de Comunidades de Castilla Sur, por ejemplo, no es seguro que sepa que dos de los tres revolucionarios comuneros decapitados aquel día corresponden al sur de Castilla... Ni tampoco que ella misma, la Junta de Comunidades, lleva precisamente el nombre del Gobierno Revolucionario que dirigió la política de Castilla durante aquellos años de 1520 y 1521: la "Junta de Comunidades de Castilla" o "Junta Comunera"... Ni que Toledo, Guadalajara, Cuenca, Madrid... son tres ciudades y una villa imprescindibles en aquella jornada.

Desde luego, ZP no acudió a su región electoral, para solidarizarse con ella ni para otorgarle el título de "realidad nacional", que tan generosamente reparte por otros lares, ni para reconocerle la consideración de Estado histórico que sólo ella, Castilla, toda Castilla, puede merecer, junto los otros tres territorios que por haberlo sido (Estados independientes históricos) figuran en el escudo de España: Castilla, León, Navarra y Aragón.

Lástima, porque su presencia allí hubiera servido para hacer creíble que desea que "todos los pueblos de España asuman con orgullo su propia identidad", como a veces dice... Quizá quienes financian a su partido y gobiernan a través de él (que no son bancas castellanas, desde luego) no le hayan dejado acudir, no sea que la colonia castellana (un puro mercado comercial y financiero cautivo) se desperece y pida un poco de dignidad. O quizá es que ZP y el PSOE no piensen siquiera en la colonia castellana, como tampoco lo hace el PP por otra parte.

A su vez, quien en estos momentos ocupa el cargo muy histórico, muy revolucionario y muy castellano de presidente de la Junta Comunera o Junta de Comunidades, José María Barreda, tampoco acudió a conmemorar a sus antecesores en el sacrificio, ni agradeció desde su palacio los esfuerzos y méritos de quienes perecieron ante el absolutismo... Claro que ni él ni Bono han consentido nunca que se erija en Toledo una estatua a Padilla, que les fundó el cargo... Aunque, eso sí, tienen la ciudad llena de los emblemas de Carlos V, que los ordenó colocar por todas partes, para demostrar que había vencido a los toledanos.

Y así siguen, bien vencidos por los mismos... tanto como quienes continúan su obra y prueban con sus actos y olvidos que tienen conquistado el cerebro y el ánimo por el creador del absolutismo (bajo cuyo mismo Estado, aunque ahora no pueda explicarlo, continuamos viviendo).

En definitiva, una nueva decapitación de Castilla por parte de PSOE y PP, la que cada año perpetran dichos partidos por estas fechas: decapitación histórica (se oculta la verdad...), decapitación territorial (...para que nadie sepa a qué regiones castellanas -varias- debería festejarse cada 23 de abril...), decapitación ideológica (...se elimina el ideario comunero, para que nadie conozca que trasciende a la actual no-democracia que padecemos...) y decapitación de dos de los tres decapitados de aquel día... cuyos representantes gubernamentales y usurpadores del nombre de su Gobierno Revolucionario, procuran que los castellanos no se conozcan a sí mismos ni descubran qué inmensa falacia premeditada perpetran contra ellos los herederos de aquel asesino y traidor probado que se llamó el César Carlos.

El grandísimo Habsburgo que, obligándonos a desangrarnos demográfica y económicamente por todos los campos de batalla de aquel avispero bélico que era Europa entonces (nada que ganar, salvo mantener las posesiones de aquella familia; todo que perder, si perdíamos, como al cabo de 150 años de esfuerzos sobrehumanos perdimos), es respondable del retraso español en todos los órdenes y quien sembró la política para que el país más poderoso del mundo en aquellos momentos, Castilla, haya acabado siendo la zona (colonia) más deshabitada de la Unión Europea en nuestros días.

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