El fútbol como deporte, no merece la cantidad de páginas y minutos que se le dedican en los medios de comunicación. Pero sí que hay momentos del fútbol que merecen un análisis detallado y una reflexión exahustiva. Ese momento son los lanzamientos de falta con barrera.
Son momentos en los que algunos sienten miedo a lo que se les avecina.
Otros en cambio no se resignan a lo que el destino les depara y lo afrontan con valentía.
Tienes que tomar decisiones drásticas: ¿qué prefieres salvar, los huevos?
¿o la cabeza?
Los hay que miran de frente.
Y los que se cubren la cara para evitar ver lo que les viene encima.
A todos les cuesta afrontar el trago, no importa la edad.
No importa el sexo.
Ni la raza.
El pelotón de fusilamiento a la inversa,
al fin y al cabo el que tiene el arma tiene el poder
Es el castigo por un error (o falta) cometido antes
Aunque en este caso, el desenlace no siempre es negativo.
Pero lo único común a todos,
Independientemente de en qué lugar del mundo estén
Es que todos ponen caras de gilipollas.
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